Eso mismo…04:00am llegó el vuelo a Nueva Delhi. Migraciones sin problemas, la valija llegó bien también y nada…todo perfecto. Me tomé un taxi en la puerta del aeropuerto al hotel. Ya sabía de antemano que ahí, como en todos los aeropuertos del puto mundo, me iba a cobrar más caro pero la verdad es que quería llegar al hotel y dormir. Me olvidé la gorra dentro del taxi y el mismo regresó al hotel a devolvérmela. Me pintó la cara de un cachetazo toda la situación. Hice el check-in, me bañé nuevamente, mire un rato internet y sin culpa alguna dormí casi 24hs de corrido. Mi cuerpo tuvo un tremendo apagón. Evidentemente, necesita descansar. Estas dos fueron las únicas fotos que saqué el 24-04 al llegar al hotel.
Debo confesar que, estando arriba del taxi yendo para el hotel, bajando ya un poco la excitación que tenía por estar acá, tuve dos segundo de lucidez de decir “Gastón, ya estás India” y cuando caí, me llargué a llorar como loco. No con tristeza, más alejado de eso, imposible, sino, todo lo contrario. Parecía/parece medio irreal todo y como me dijo alguien que quiero mucho: “Vos te pusiste ahí” y sí…sin duda alguna de ello, pero no deja de ser surreal el hecho de estar finalmente acá.
India, ahí vamos!
♥️♥️
25/04/2017