
Tomás, en un hermoso gesto, compró como 7 de estas tazas y yo recién ayer retiré la mía. No sé cuentos Starbucks se recorrió para conseguirlas, todo (y únicamente) porque no me quiero imaginar lo mucho que Florencia le rompió las pelotas insistió. Algunas fotos de la hermosa taza (junto con un Néstor que me maúlla porque quiere comida que ya tiene servida en su bowl).



30/08/2021