Llegamos a ese punto del año donde todo el mundo quiere tomarse una birra, hablar mal sobre el laburo y agarrarse un pedo tal que terminas abrazando y diciendo “te quiero” a un total extraño. Por suerte, nada de todo eso pasó, salvo lo de hablar mal sobre el laburo, eso nunca cambia.
La luz no colaboró mucho y el fotógrafo tampoco se esmeró demasiado. El próximo 365 lo voy a hacer en el 2059.
14/12/2021